De chapas por Firenze

Por segunda vez en mi vida, acudí este pasado fin de semana al encuentro de coleccionistas de chapas (los mal llamados 'chaperos') de Firenze. Mi pasión por Italia es de sobras conocida pero si además de reencontrarme con grandes amigos, empezando por mi anfitrión Claudio y su esposa Fulvia, pasando por Silvano (presidente del club italiano de coleccionismo cervecero 'Il Barattolo') y acabando con tantos otros coleccionistas, tenemos en cuenta la parte dedicada al intercambio, pues puedo considerar la jornada como perfecta.

En esta ocasión eramos menos que hace 2 años. Un total de 25 'chaperos', la mayoría italianos, pero también franceses, húngaros, españoles (evidentemente) y hasta un polaco, que lleva esto del coleccionismo tatuado en la piel (hablo literalmente).

Después de una sesión de 6 horas de intercambio de tapones corona sólo interrumpida por la pausa del bocadillo puedo estar satisfecho.... unas 600 chapas nuevas para la colección (varias de ellas españolas bastante antiguas), gran parte de mi stock cambiado, algunas cervezas llenas que me he traído a casa y ya comentaré... buenos momentos, etc....

Ya por la noche, cenando con mis amigos de Livorno (mis anfitriones), tuve oportunidad de probar una cerveza artesana local, de BAT (Birrificio Artigianale Toscano). En concreto degustamos la 'Càrma', de 6º para acompañar el ágape. La verdad es que justita, justita. Correcta y punto. Al día siguiente, regreso a casa... y faenón que me espera ahora ordenando y catalogando el material obtenido... pero bueno.... sarna, con chapa, no pica!